Un auténtico caos invade una habitación muy concreta de la Dublin City Gallery - The Hugh Lane (Charlemont House, Parnell Square North). Se trata del estudio del artista anglo-irlandés Francis Bacon, que estaba emplazado originalmente en Londres. El traslado se inicia a finales de los años 90, cuando su heredero John Edwards y el administrador del patrimonio de Bacon, Brian Clarke, donan el conjunto a la galería irlandesa. Más de 7000 artículos fueron catalogados y enviados de una ciudad a otra, gracias al trabajo de conservadores y arqueólogos que realizaron minuciosamente la cartografía del espacio para reproducirlo, de la forma más fidedigna posible, en The Hugh Lane. Impresiona ver el lugar de creación de este reconocido artista, sentirse parte de él. Y es que no solo los elementos allí depositados fueron originariamente de Bacon, las paredes, el techo, el suelo y la puerta de entrada son los mismos que un día estuvieron en pie en la capital inglesa.

Además del impresionante estudio y algunas obras de Bacon, The Hugh Lane alberga una modesta pero interesante colección de arte moderno, entre la que destacan los paisajes románticos y otras escenas impresionistas, así como piezas de arte más actual de artistas irlandeses e internacionales. Merece realmente la pena dedicar una o dos horas a este interesante espacio, de acceso gratuito, y aprovechar la visita para pasearse por el jardín que se encuentra justo enfrente, Garden of Remembrance, diseñado en memoria de aquellos que lucharon y murieron por la independencia de Irlanda.